De dos en dos

Van de dos en dos y no hay explicación posible. Poco a poco vas minando la fortaleza que crearon a su alrededor, y tu, enfermedad maldita te vas envalentonando por momentos. Si, Maldito cáncer, siempre apareces a veces disfrazado de tumores benignos para luego asestar la estocada final. No tuviste bastante con llevarte a una excelente persona, que ahora buscas ampliar tu tesoro precisamente de su misma familia. Te diré algo que aunque supongo sabes, puede hacer que recapacites y te retires para no volver. Yo estoy aquí, luchando por una buena amistad. Ansío una recuperación gracias a tu retirada, pero si no consigo el objetivo, volveré a escribir para que sientas escalofríos de pánico.
De dos en dos se va sufriendo, pero también es cierto que de dos en dos, ellas se van consolando. De dos en dos, luchan, lloran, combaten y se harán más fuertes. Yo me uno para que no solo seáis dos. Quizá sea posible que un grano de arena haga remover montañas. Ahora es el momento de no venirse abajo. Es el momento de luchar, ser fuerte, plantar cara a la vida para aferrarse a ella. Con estas palabras que se me hacen difíciles de explicar quiero al menos intentar dar la fuerza necesaria a dos personas que lo están pasando muy mal. Puede que no sea el más indicado para este menester, pero, desde aquí os pido que no dejéis de luchar. Besos, abrazos y todo el cariño del mundo. Dedicado para vosotras.
Mientras tanto no me olvido de saludar a todos como siempre os tengo acostumbrados, por supuesto desde mi pequeño rincón de la imaginación.