Enciende la luz de tus sueños y déjate llevar. Que las alas de tu imaginación te lleven bien alto para disfrutar de un mundo maravilloso. Ojalá los sentimientos fluyan por tu cuerpo rodeando cada centímetro de tu corazón. No quisiera perderme un solo instante ninguno de los latidos de tu alma. Quiero ver una sonrisa permanente en tu mirada y no deseo ver lágrimas bordeando tus labios.
Dame el respiro de poder sentir junto a ti el placer de la vida, y, déjame estar a tu lado para acompañar la alegría de tu largo caminar por la vida. No soy nada sin tu compañía, no soy nadie sin tu mirar. Pero si tu dejas que me acerque, haré de tu camino una alfombra de flores primaverales y de eterno frescor.
Un saludo lleno de esperanzas.
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