viernes, 27 de septiembre de 2013

Animado para volver a la mar

Ese canto del mar profundo en el interior de la caracola de oro, me hace pensar que no quiere morir en la arena de esta playa en la soledad y solo acompañada por la luz de la luna llena. Me pide compañía en alta mar, para que juntos soñemos y cantemos a nuestros sentimientos más profundos.
La madre naturaleza siempre supo ser inteligente y tanto a este mar como a mí, nos dotó con con el don del cariño mutuo. No en vano la vida hizo que naciera en las cercanías del mar y, yo agradecido por ello, solo quiero morir cerca de este mar. Así que voy a preparar mi velero Esmeralda para volver a surcar sus aguas y acariciar la brisa que ella quiere desprender sobre mi. Eso si, llevo conmigo a mi gran tesoro para que me guíe por estas nuevas aventuras de la imaginación. Mi caracola dorada, la voz de este mar, y, por que no decirlo, el aliento de volver a respirar a mar, a sal y la luz de mis nuevos amaneceres y la linterna de mis más bellos sueños.
La pondré justo en el puente de mando para que acompañando a la brújula me lleve por estos mares con el mejor de los vientos. Sigo soñando, fantaseando e ilusionado por esas cosas que en la vida real no existen.
Entre tanto, no quiero dejar de volver a saludaros como siempre os tengo acostumbrados desde este pequeño rincón de la imaginación, esperando que el viento de la ilusión me acompañe para despertar en vuestros corazones nuevas razones para vivir emocionados.

jueves, 19 de septiembre de 2013

El más bello cantar

Entre la espumosa ola de la orilla, y convertida en algodones, veo asomar algo resplandeciente. Esas olas que acaban convirtiéndose en borregos de mar, parecen traer entre sus burbujas algo diferente al mar. Quiero apresurarme para no perder ese posible tesoro que me lleve un poco más cerca a descubrir esa leyenda. ¿Puede ser que sea lo que esperaba?
A la medida que me voy acercando observo con detenimiento el color y la forma. Tal y como la Reina de las hadas me anunció, algo retorcido y con un color parecido al oro. Si la trajo el mar, ¿tendrá sonido de olas rompiendo en la orilla?. La he cogido y me la he acercado al oído, y cual ha sido mi sorpresa cuando desde su interior me parece escuchar el llanto del mar muriendo en la arena. Una Caracola vacía de vida natural, pero en su alma perdura su precioso cantar. Dime, caracola, ¿eres tu la que me acerca a esa leyenda?
Si el cantar de tu interior, son los suspiros del mejor amor, estoy de enhorabuena, ya que en mi corazón más profundo, llenarás mi vida de felicidad cada segundo.
Mientras los suspiros del mar embargan mi niña mentalidad, os vuelvo a saludar. Eso si, desde mi cuerdo y recóndito jardín de la imaginación, para querer llenaros de ilusión.

viernes, 13 de septiembre de 2013

En la orilla del mar

En la húmeda arena de la playa que linda con el jardín voy buscando esa preciada leyenda que ronda en este pequeño rincón. Sin instrumentos para saber lo que buscar ni a lo que me debo enfrentar, sigo paseando con las caricia de las olas al caminar. Aún no sé bien donde fijar mi vista, así que busco tanto en la arena seca como en el pequeño rincón que ocupan las aguas de este inmenso y maravilloso mar. Solo sé que es algo retorcido y que tiene un color parecido al oro, pero aún no sé como es la pieza que pueda completar este enigma legendario.
Otro detalle al que debo prestar atención es que me dijo la reina de las hadas es que pertenece al mar y que suena a las olas rompiendo en la orilla, pero el agua es agua y no parece de color oro. La arena se parece más al oro pero no pertenece al mar. Mis preguntas se multiplican, y parecen no tener solución. Al menos. el paseo por la orilla calma este corazón inquieto. Aunque creo adivinar de lo que pueda tratarse, no quiero lanzar campanas al aire antes de descubrir la razón de lo que me a traído a esta orilla.
Mar, arena, oro, retorcido; leyenda incompleta hasta no encontrar el suspiro que me lleve a encontrar la llave de este misterio.
Mientras sueño con las fantasías de un niño ya bastante crecido, os vuelvo a saludar como siempre os tengo acostumbrados desde el rincón de la imaginación más infantil que me trasmitió Petter Pan, todo un ídolo mundial.

miércoles, 11 de septiembre de 2013

La reina de las Hadas

No hay marco para tan preciada escena. No tiene precio lo que ahora mismo estoy admirando en el estanque de mi jardín. No hay corazón que se pueda resistir a tan bella estampa. Todas las hadas disfrutando del agua, bebiendo, jugando y conversando. Las cuento a cientos, y entre ellas también se acercaron otros tantos seres diminutos para beber y jugar. Es tal la belleza que sería imposible plasmarla en un lienzo, y tanta la intensidad, que ni una fotografía pudiera mostrar todo su esplendor.
Al poco tiempo una de las hadas se ha acercado a mi, y me ha dicho casi en silencio que todas saben a lo que he venido.
Ha sido tanto mi asombro que casi no me doy cuenta que el agua de la cascada se separa para dejar paso a la reina de las hadas. Se llama Bracken Goblinglow, conocida entre todos los seres diminutos del jardín como la reina Brack. Hermosa, de cabello rubio y ojos verdes, y una sonrisa celestial. Sus alas transparentes y con un
halo de luz a su alrededor. Sin beber siquiera, se acercó a mi y me dijo:
- Tu fantasía hizo que yo fuera reina de tu jardín, así que solo necesitas saber de esta leyenda que buscas una sola cosa. Pregúntate esto ¿ que cosa marina puede hacerte llegar el sonido del mar? Mira mis cabellos y busca esa preciada pieza entre tu jardín y tu mar. Retorcida y alargada, fue nido de ermitaños y en ella se encuentra el mejor sonido que traen las olas.
Mientras pienso, y espero posibles respuestas de vuestra parte, os vuelvo a saludar desde este rincón de la imaginación más absurda, no sin antes rogaros una posible solución. A ver si me sorprendéis.

jueves, 5 de septiembre de 2013

Donde beben las hadas.

Nadie conoce mejor el jardín que los minúsculos seres que lo habitan. Así que quiero, necesito y deseo saber más sobre esa leyenda. Quiero saber  todos los detalles, y solo ellos pueden ofrecerme todo o que necesito saber.
¿De que habla la leyenda?, ¿De donde surge toda esta historia?, ¿Cuando sucedió?, ¿Puede convertirse en realidad?, y tantas otras preguntas que, muero en deseo de saber más de ella. Me pongo a pasear por mi jardín este atardecer para ver si algún diminuto ser, aparece para preguntar y hablar plácidamente para investigar sobre ella. Justo al lado de las margaritas veo uno de ellos. Está regando y cantando a estas hermosas flores, y, me da algo de apuro entorpecer su faena. Las está cuidando con tanto cariño que miedo tengo de acercarme para no marchitar el esplendor que están alcanzando. Esperaré un poco, y mientras os dibujo este cuadro tan bonito. Él,  vestido de verde, silbando, cantando poemas de amor y regando las flores con las lágrimas de su propia emoción. Parece apasionado, no me cabe duda, y las margaritas parecen realzar su blanco más puro y en su corazón parece brillar el sol.
Creo que ya terminó con ellas; voy a preguntarle.
- Perdona, quisiera hacerte una pregunta. ¿Que sabes de la leyenda que estoy buscando?
Ahora es cuando me he quedado mudo ya que su respuesta ha sido contundente. Es verdad que que me ha sonreído y guiñado un ojo. Sabía de antemano que buscaba esa leyenda y, rápidamente se ha apresurado a decirme que esa leyenda solo lo saben las hadas que beben en la cascada que yo mismo construí. Mi sorpresa ha sido mayúscula; ¿Como lo ha sabido? Me dirijo hacia la cascada ya que me ha dicho que ellas suelen ir a beber al anochecer. Me ha advertido que no las moleste hasta que no hayan saciado la sed ya que suelen ser más frágiles que el cristal.
Mientras espero a que terminen de beber, os vuelvo a saludar desde este rincón de la imaginación buscando la leyenda que puede que ellas sepan.

miércoles, 4 de septiembre de 2013

Dice la leyenda...

En el rincón de mi imaginación, entre el jardín y el mar, cuenta la leyenda que en algún momento de la vida surge algo inesperado que suele venir acompañado de buena suerte y grandes aventuras. Estoy dispuesto a buscar la verdad sobre esta leyenda, ya que los pequeños duendes, elfos, hadas y demás seres fantásticos no suelen equivocarse.
Ya recorrí el jardín y el mar de mi ilusión, y no encontré vestigios de esta leyenda, así que solo me queda buscar justo en la linea que los divide. La playa que los separa puede ser un buen lugar para encontrar ese equilibrio que pueda acompañarme en esta nueva aventura. Ni por un momento pienso en desmantelar esta hermosa playa, ya que es la que me permite estar en contacto con toda la belleza que me proporcionan estos dos mundos diferentes. Así que pasearé por ella con sumo cuidado y con las dulces caricias en mis pies que me acercan las olas del mar. La playa no es muy larga, así que tendré algo de paciencia para observar con detenimiento cualquier cosa que me lleve a descubrir algo diferente.
Mientras tanto, os sigo saludando desde este rincón de la imaginación a la espera que la leyenda aparezca de algún modo.

De vuelta

Después de unas semanas de descanso, hoy quiero volver a retomar el rumbo de este blog. Unos días de descanso han conseguido que la mente se haya reorganizado algo. Creo que es hora de volver a pasear por los bonitos jardines creados y volver a navegar por esos mares de la imaginación un tanto abandonados por un descanso estival.
Mañana volveré a la escritura continua para hacer que vuestra vuelta a la rutina sea más llevadera. Supongo y espero que vuestras vacaciones de verano hayan transcurrido de maravilla, y que la alegría continúe en vuestros corazones.
Saludos a todos de nuevo y espero que vuestras visitas por este blog sean una escapatoria al estress diario. Yo mientras tanto, ya me pongo manos a la obra para seguir escribiendo otra temporada, e imaginando en el rincón que siempre me acompaña. Bienvenidos.